En la Capital Federal es el único distrito de toda la República Argentina donde no se adhirió a la Ley Nacional de Medicamentos y ahora los farmacéuticos apuran una ley para prohibir la venta de remedios en kioscos. Actualmente en la Legislatura porteña hay dos proyectos: uno permite que los medicamentos de venta libre sigan disponibles en distintos tipos de locales y otro que solo autoriza a las farmacias.
En el Congreso Nacional en el año 2009 fue aprobada la Ley con un alto consenso incluidos los legisladores del PRO, quienes ahora en la Legislatura parece que se contradicen con el proyecto que encabeza Helio Rebot que permite la venta y no se adhiere a la ley nacional.
Alfredo Di Salvo, titular de Asociación de propietarios de farmacias argentinas, ASOFAR, dicen que por no estar explícitamente reconocida la ley, la Ciudad permite que todavía se mantenga vigente «el decreto Nº 2.284 de Carlos Grosso y Menem, data de 1991, esto no puede ser, es una peligro para los consumidores», «No puede ser que un país entero tenga ya reglamentada una ley que protege a las personas de medicamentos adulterados y la Ciudad siga con un decreto peligroso».
La legislatura analiza por estos días dos proyectos:
- El de Antonio Campos,radical que quiere adherir la Ciudad a la ley nacional y de esa manera prohibir la venta de cualquier medicamento. Según dice la iniciativa: «Concordando con esta Ley Nº 26.567, pensamos que la preparación de recetas, la dispensa de drogas, medicamentos, incluidos los denominados de venta libre y de especialidades farmacéuticas, cualquiera sea su condición de expendio, solo podrán ser efectuadas en farmacias habilitadas».
- El de Helio Rebot, del PRO, donde se plantea una ley similar de cuerpo, pero el artículo cuatro es el que lo aleja de Campos y los dueños de farmacias. Según dice la iniciativa: «La venta y despacho de especialidades medicinales denominadas de venta libre también estará permitida en Quioscos y Maxi quioscos (conforme capítulo 14 sección 4.2.14 del Código de Habilitaciones y demás legislación vigente) así como en otros establecimientos además de farmacias habilitadas, siempre y cuando cumplan con los requisitos para comercializar productos alimentarios para consumo humano».
Es contradictorio la posición del PRO ya que cuando fue votada la Ley Nacional en el Congreso, este partido acompañaba la idea y ahora se contradice.
Di Salvo dijo que ellos esperaban que en este año electoral la Ley se aprobaba rapidamente: «Creemos que antes de octubre vamos a tener una ley que proteja a los ciudadanos, ya que tenemos comprobado que la mayoría de los remedios truchos o vencidos que se venden hoy en la Ciudad son en kioscos y supermercados, y lo que está en juego no es política, es la salud de personas».
Cuando se aprobó la Ley Nacional la Unión de Kioskeros presentó un amparo a la Justicia, al que no le hizo lugar el fuero en lo Contencioso, Administrativo y Tributario.
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