El Congreso sancionó una nueva ley de movilidad jubilatoria. Como parte de la misma, la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) aplicará un 7,2% de aumento retroactivo a abril de 2024. Por ello, los jubilados y pensionados percibirán un pago adicional cuando entre en vigencia la norma.
La nueva ley de movilidad de Anses establece una recomposición a cuenta de la inflación de enero.
Conforme a la normativa, las jubilaciones y pensiones debieron subir un 20,6% en abril pasado. Descontando el 13,2% ya aplicado por el Gobierno de Javier Milei, restaría un aumento del 7,2%. Es decir, la recomposición no será del 8,01% como se habló.
Por ello, la jubilación mínima debía ser de $183.615 en lugar de los $171.283 liquidados. La de mayo de $203.832, en lugar de $193.141; la de junio de $221.830, en lugar de $206.931; la de julio de $231.102, en lugar de $215.581; y la de agosto de $241.686 en lugar de $225.454 como lo fijó la Resolución 390/2024.
Es decir, los jubilados de la mínima percibirán un pago retroactivo de aproximadamente $69.675.
Este pago retroactivo no sólo será para los beneficiarios de la mínima. También lo percibirán el resto de los jubilados y pensionados.
El pago retroactivo de Anses también incluirá a titulares de la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) y las Pensiones no Contributivas (PNC). Esto se debe a que dichos beneficios están atados a la jubilación mínima.
El bono de $70.000 pasará a incorporarse la jubilación mínima
Los jubilados tendrán garantizado 1,09 veces la canasta básica para el adulto mayor. Como resultado de ello, el bono de $70.000 pasará a incorporarse a la jubilación mínima.
El importe se ajustará por movilidad. Asimismo pasará a formar parte del sueldo anual complementario (aguinaldo).
Considerando los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la canasta básica es de $291.472. Con lo cual, ningún jubilado cobrará menos de $317.704,48.
