En le mes de febrero, se vienen los anunciados carritos de la Costanera Sur con parrilla a gas y crece la polémica, deberán decirle adiós al carbón y los clientes y cocineros ya debaten si el tradicional sándwich de chorizo pierde así su esencia y el sabor. Se trata de veinticuatro (24) nuevos puestos que tendrán planchas, freezer, piletas y heladeras. Desde el Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño dicen que se busca mejorar la “identidad visual” del lugar y sumar seguridad y limpieza para las miles de personas que cada día eligen los carritos para comer.
Los carritos de la Costanera Sur son un nuevo “Puesto Rodante de Venta de Alimentos”, que el Gobierno entregará en comodato, cada uno, tendrá heladera, freezer, dos cocinas a gas y medidor de luz para que esté todo regulado y con un “clásico” amarillo en su frente.
Actualmente funcionan los 28 puestos pero como cuatro de ellos no cumplían con los requerimientos necesarios, los reemplazados serán 24 serán reemplazados, la condición es de que los puestos viejos no sean distribuidos en otros puntos de la Ciudad. Después llegará el turno para los de la Costanera Norte.
Luego del anuncio oficial llegó la polémica es que este nuevo método involucra a la mismísima piedra filosofal del ritual sagrado y avanza sobre un pilar del patrimonio gastronómico local. En la República Argentina las estadísticas indican que se consumen unos 600 millones por año, a razón de 15 por cabeza, la pregunta es: ¿El choripán es más sabroso al paladar cocinado con Carbón ó Gas?.
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