Según consigno el Diario La Nación, que un despachante de Aduanas que pidió no ser identificado explicó al matutino que en la actualidad cualquier persona que recibe mercaderías del exterior debe dirigirse a Ezeiza y estar registrado como importador. El Gobierno pone más trabas al cepo al dólar, y a través de la Aduana, organismo que depende de la Administración Federal de Ingresos Públicos, AFIP, traban las compras por Internet.
Con el objetivo de desalentar las compras al exterior y disminuir la salida de dólares de los argentinos, la Aduana hace aproximadamente un mes, que a la mayoría de los paquetes que llegan los manda para Ezeiza y los bloquea, ya que para poder retirarlos los adquirientes se deben registrar como importadores, igual que lo hacen los textiles deben además, conseguir un certificado del origen de donde provienen.
Este actuar de la Aduana no es ilegal ya que se vale de normas vigentes, que no se venían aplicando o que sólo se hacia en parte, ya que se llevaba un control aleatorio de las mercancías que ingresaban por correo o por el sistema de couriers, que se trata de un operador que entrega las mercaderías puerta a puerta.
Régimen de excepción que autoriza a particulares que reciban mercaderías enviadas del exterior, siempre y cuando no superen los 50 kilogramos y hasta un valor FOB (en el puerto de origen) de u$s 1000.-. Quedando excluidas aquellas mercaderías que se encuentran alcanzada por alguna prohibición o intervención, como alimentos, medicamentos, textiles, calzado, electrónica o cualquier producto que tenga un tratamiento tributario diferencial.
El matutino da el ejemplo de un comprador que habitualmente traía tres camisas para uso personal desde Hong Kong, que se las entregaban en la puerta de su casa por un courier. Pero hace un mes le llegó la citación de la Empresa de courier le comunicaban que debía dirigirse al área de carga General de Ezeiza, para poder retirarlas. Para poder hacerlo, debía registrarse formalmente como importador y, además, presentar el certificado de origen de las camisas. Trámite que prácticamente es imposible de realizar por un particular, el resultado de esta operación las prendas regresaron a Asia y se revirtió la compra.
Pero con muy pocos controles que se realizaban, los argentinos ingresaban productos textiles, y hasta inclusive electrónicos, comprados por Internet y no tenían ningún inconveniente. Pero ahora, la AFIP por intermedio de la Aduana controla casi todos los paquetes provenientes del exterior y los que no cumplen con el régimen, por tratarse de mercaderías con intervención especial, por ejemplo, son enviados a régimen general, y en esos casos deben cumplir con los trámites de cualquier importación. Algo que siempre se debió haber echo.
Y para retirarlo la persona se debe registrar como importador y además, presentar un certificado de origen de ala mercadería, que se trata de un documento emitido por un organismo especializado, en el que el vendedor da fe del origen del producto. Que deberá contener el visado del Consulado argentino del país de donde proviene.
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