El Senado de la Nación convirtió en Ley las medidas de anticrisis propuesta por el Gobierno, entre ellas están el polémico blanqueo de capitales, una moratoria impositiva y la eliminación de la «Tablita de Machinea»,que reduce los impuestos a las Ganancias que deben pagar los trabajadores que perciben más de $7000.- empezará a regir el 1 de enero del 2009.
El tema que mas discusión acarreo fue el capítulo referido al blanqueo de capitales, que para la oposición constituye una virtual apertura de lavado de dinero proveniente del narcotráfico u otros orígenes ilícitos.
Además, dijeron que se estaría incumpliendo con acuerdos internacionales en materia de legislación antilavado.
Los legisladores kirchneristas afirmaron que no hay cambios, pues todo ingreso de fondos dudosos debe ser reportado a la Unidad de Información Financiera, que investiga los presuntos lavados de dinero, aunque la oposición señaló que en los últimos años no hubo ninguna condena judicial por este motivo.
Votación:
- Paquete de medidas anticrisis obtuvo 42 votos a favor y 27 en contra en general, entre estos los integrantes del bloque oficialista Juan Carlos Romero, Sonia Escudero y Elena Corregido.
- Blanqueo de capitales después de una larga discusión obtuvo 39 a favor y 28 en contra, del oficialismo votaron en contra Carlos Reutemann, Roxana Latorre, en tanto se abstuvo el cordobés Roberto Urquía, el jujeño Guillermo Jenefes también se abstuvo, pero en un sólo artículo.
- Eliminación de la «Tablita de Machinea» no fue objetada por nadie, por lo que se aprobó por unanimidad, 68 a favor 0 en contra.
Miguel Ángel Pichetto,jefe de la bancada del Frente para la Victoria, una vez finalizado el debate se mostró molesto con el radicalismo por su oposición a esta iniciativa, y afirmó que «el centenario partido parece haber perdido el rumbo».
También recordó que la UCR votó en contra de la estatización de las AFJP, que era «una posición histórica de esa fuerza», y se opuso a la expropiación de Aerolíneas Argentinas.
Pichetto defendió el blanqueo de capitales diciendo que esta norma «es casi calcada» de las que se dictaron durante los gobiernos de Raúl Alfonsín y de Carlos Menem, y que «todas plantean la eximición penal en el marco de los delitos tributarios».
Puso como ejemplo un blanqueo que hizo Italia, que permitió el ingreso de capitales «por 60 mil millones de euros», y estimó que los capitales de argentinos en el exterior se calculan en 130 mil millones de dólares.
Fabián Ríos, titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, fue el primero en hablar asegurando que el blanqueo «no abarca perdones de ninguna naturaleza para el dinero que proviene de actividades de narcotráfico o ilícitos», y remarcó que se trata de «un mecanismo similar a los aplicados en Bélgica, Grecia, Italia y Portugal».
Indicando que «No hay que encontrar una especie de perdón o eximición para quienes hayan mal adquirido capitales», y defendió el paquete de medidas recordando el impacto que las crisis tienen sobre el sistema financiero, al recordar que «en 2001 los depósitos a la vista bajaron el 25 por ciento, y los plazos fijos el 65».
Puntualizando que «El sistema financiero responde a cualquier problema con una salida de depósitos. No logramos confianza ni siquiera para los que quieran lavar dinero».
Sobre la regularización de impuestos y aportes, indicó que «no se pretende una mayor recaudación fiscal sino aliviar y generar mayor rentabilidad a las pequeñas y medianas empresas».
Acerca de la «Tablita de Machinea», sostuvo que «fue mal creada», y remarcó que su eliminación es «un fuerte aporte del fisco para financiar el consumo», ya que el año próximo implicará una baja de la recaudación de 3.166 millones pesos».
Después de Ríos el que hablo fue Juan Carlos Marino, del partido radical advirtiendo que con el blanqueo de capitales se abre la puerta «al ingreso de dinero del narcotráfico» y que en la historia «hubo más de ochenta moratorias, la mayoría de dudosa efectividad, pero que perjudicaron el fomento de una cultura tributaria».
Explicando que con este tipo de medidas «se genera la idea de que ante el incumplimiento hay que esperar hasta la próxima moratoria» y que «no se hace diferencia entre la evasión simple y la agravada», y que es «una amnistía penal para los que no cumplieron».
Reconociendo que la «tablita de Machinea», fue «un impuesto injusto», creado en 2001, pero dijo que «hay que tener en cuenta el contexto en que se debió aplicar».
Indicando que ese gravamen «no fue demagógico, porque gravó a su electorado, la clase media», recordemos que el gobierno era radical.
Liliana Negre de Alonso, justicialista disidente, senadora puntana, también hizo una fuerte advertencia sobre el posible lavado de dinero proveniente de la droga. Remarcando que «¿No sabemos que el narcotráfico está invadiendo Latinoamérica? Nosotros le estamos abriendo la puerta, y estamos sacrificando a nuestros niños, que van a ser envenenados por la droga».
Calificando a la moratoria fiscal de «inequitativa» y de «absoluta falta de justicia social» y que «muchas personas físicas y PYMES se sacrificaron para cumplir con el Rafa (anterior plan de regularización impositiva) ven hoy como quienes tiraron manteca al techo tienen ahora una condonación de capitales e intereses, con refinanciación a 120 meses con tasas absolutamente bajas».
Sonia Escudero, senadora salteña, afirmó que «el Estado y la AFIP incurren en el artículo 278 del Código Penal», que penaliza a quien encubre la comisión de delitos, por lo que sostuvo que hay funcionarios públicos que «deberían ser enjuiciados por facilitar» el lavado de dinero.
Advirtiendo que «Argentina será un paraíso fiscal por unos cuantos años», y que esta iniciativa, «deslegitima la autoridad moral del Estado».
Añadiendo que «hay tanto dinero negro proveniente de delitos que ya hay un problema físico de donde guardarlo fuera de los bancos».
En referencia a la moratoria impositiva, puntualizó que «se está haciendo un jubileo y un perdón de recursos que son de las provincias».
Juan Pérez Alsina, senador salteño, embistió contra el blanqueo de capitales, y pidió al oficialismo: «saquen ese artículo, por amor a Dios».
Marcelo Fuentes, el kirchnerista neuquino, rechazó estos argumentos y sostuvo: «no acepto que se cuestione la honorabilidad de quienes apoyamos este proyecto». «Me alegro de que habremos logrado al menos la mitad, el paraíso», dijo en respuesta a quienes dijeron que Argentina se convertirá en un «paraíso fiscal».
Gerardo Morales, senador radical, sostuvo que «el problema más grave que tiene el Gobierno es la credibilidad, porque la gente no le cree». «No somos la máquina de impedir, como dice Néstor Kirchner, pero es nuestra responsabilidad marcar cuales medidas son buenas y cuales son malas», apuntó Morales, quien enumeró una serie de proyectos oficiales a los que el radicalismo apoyó con su voto.
Adelantando que el radicalismo va a reportar como sospechosa toda operación de blanqueo. «Ojo a todos los que quieran blanquear, porque el radicalismo los va a denunciar», aseveró.
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