El Ministerio de Capital Humano implementó una reforma clave en los requisitos para la constitución de cooperativas de trabajo y de provisión de servicios para productores rurales. A partir de ahora, deberán contar con un mínimo de seis asociados para formalizar su creación, dejando atrás la flexibilización que permitía conformarlas con tres o cinco personas.
Capital Humano efectuó los cambios mediante el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES).
Esta modificación responde a un análisis exhaustivo y a los resultados de fiscalizaciones realizadas durante el último año. Según datos oficiales, en 2023 se registraron 2.684 cooperativas con menos del nuevo número mínimo requerido. Sin embargo, una baja proporción de estas entidades cumplió con las normativas vigentes, lo que encendió alarmas sobre la sostenibilidad y adherencia a los principios cooperativos.
Este cambio plantea un nuevo desafío para los actores del cooperativismo, quienes deberán adaptarse a un marco más exigente. Sin embargo, Capital Humano asegura que la medida promete fortalecer el sector, priorizando su sostenibilidad y su capacidad para responder a las demandas de fiscalización y a los estándares de calidad que exige el mercado actual.
Fortalecimiento del modelo cooperativo aplicado por Capital Humano
Capital Humano indicó que el cambio busca reforzar los valores y principios del cooperativismo. Como resultado de ello se espera promover una mayor participación y compromiso de sus integrantes.
De acuerdo al ministerio, este enfoque garantiza una gestión más sólida y sostenible para las cooperativas. De esta forma se asegura el respeto por los ideales que rigen este sector estratégico para la economía social.
Excepciones y plazos de adaptación para cooperativas
El INAES considerará excepciones para cooperativas con menos de seis integrantes en actividades específicas, como servicios informáticos, culturales o de cuidado, siempre que se demuestre la viabilidad de su operación bajo estas condiciones.
Además, las cooperativas existentes que fueron conformadas con tres o cinco miembros tendrán un año para adecuarse a la nueva normativa. No obstante, las áreas mencionadas podrán pedir una excepción formal, evaluada por la entidad reguladora.