El gobierno ha decidido cambiar el proyecto oficial de la reforma del Impuesto a las Ganancias para evitar un golpe opositor y la Ley de Emergencia Social. Ahora, se prevé subir el mínimo no imponible un 25 %, lo que ascendería 10 puntos más de lo que proponía el proyecto original que había sido presentado el 22 de noviembre, y el no dejó muy conforme a nadie con sus modificaciones.
El gobierno de Mauricio Macri se prepara para encarar la negociación por la reforma del Impuesto a las Ganancias. Por ahora, ya ha cedido para evitar un embate opositor al respecto y la declaración de la emergencia social.
Para discutir las fuentes de financiamiento, especialmente con el impuesto al juego y el impuesto a la renta financiera más que a la minería y a las operaciones con dólar futuro.
Tras el compromiso por $25.000 millones en los próximos tres años para organizaciones sociales, el Gobierno Argentino busca encauzar el debate por el Impuesto a las Ganancias hacia la racionalidad, contraponiéndose con el gasto más abultado que lo que Sergio Massa anunció en su propuesta.
En el Congreso, el oficialismo va a apostar a dividir los bloques opositores para moderar la iniciativa del Frente Renovador, llevando del 15% a una cifra cercana al 25% en la suba del mínimo no imponible.
Ahora, el mínimo no imponible es de $18.000 de salario neto para solteros, y se iría a $21.700 con el 15% de aumento impulsado por el Poder Ejecutivo. Recordemos que también se propuso pasar del 9% al 5% la retención más baja, y un 2% para los que tributen por primera vez. Para mejorar esto, desde el oficialismo señalaron que exigirán definiciones precisas sobre el financiamiento.
Sergio Massa había propuesto un aumento del 50% del mínimo no imponible y de las alternativas para financiarle el oficialismo se mostró abierto a debatir sobre los gravámenes al juego y la renta financiera.
Los funcionarios de Mauricio Macri pusieron en duda los números del Frente Renovador, dado que con su esquema habrá un cálculo fiscal de $48.000 millones y para compensarlo incluyó las retenciones a la minería y un impuesto extraordinario al dólar futuro. Para el gobierno, demandaría unos 90.000 millones y los tributos no superarían los 20.000 millones.
El ministro Prat Gay adelantó que le van a pedir a AFIP que audite las cosas porque algunos directamente no existe. Hoy en día el 97% de las Lebacs pagan Ganancias porque están en manos de personas jurídicas.
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